El pasado domingo 20 de noviembre tuvo lugar la 7ª y última prueba del Trofeu català de quad resistencia.
Se celebró como viene siendo habitual en la población de Gurb, cerca de Vic.
Un gran ambiente de competición a pesar de haber tenido lugar tan solo una semana después de la prueba disputada en Cassa de la Selva, que había estado suspendida por la lluvia en dos ocasiones seguidas.
Circuito lleno de barro en casi todo el trazado como consecuencia de las lluvias de estos días, que hacía que tanto pilotos como quads terminaran la tanda de entrenamientos con aspectos de auténticas rocas andantes. En la zona de boxes, los asistentes, mecánicos y pilotos se esmeraban en limpiar el quad para que el exceso de barro acumulado no perjudicara la mecánica dando lugar a algún problema que impidiera una buena clasificación.
Una vez dado el banderazo de salida, con el rodar constante de los quads y el sol que timidamente apareció durante la mañana, lograron que poco a poco el abundante barro pasase a ser solo un recuerdo. Aún así, el circuito permaneció en muy buen estado para que los pilotos se lucieran cruzando sus máquinas en las curvas dando un espectáculo al numeroso público que rodeaba el trazado.
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